Una metodología para realizar un vídeo veterinario – dr.Herriot

Una metodología para realizar un vídeo veterinario

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En dr.Herriot seguimos un protocolo para realizar las producciones de vídeo. El objetivo es que todos los pasos se desarrollen de manera fluida y nuestros clientes tengan la información suficiente para saber cómo se está desarrollando el proyecto y los resultados que se van a obtener. Además facilita el trabajo con las productoras.

El vídeo marketing en el sector veterinario tiene sus peculiaridades: 

  • Su objetivo es, principalmente, la información y la formación y no el entretenimiento (no quiere decir esto que no deban ser entretenidos, pero el ocio no es su finalidad).
  • Raramente se pueden abordar grandes producciones porque el público suele ser muy limitado, unos cuantos miles de profesionales, salvo cuando los vídeos van dirigidos a los propietarios de animales de compañía. Por lo tanto, hay que optimizar los recursos al máximo y tener fórmulas que causen impacto a un coste moderado.
  • Los canales de difusión no son masivos y muchas veces son tan peculiares como las pantallas en los stand de congresos y en las ponencias, los envíos de vídeo por WhatsApp o los monitores de televisión de las salas de espera de las clínicas. Y por supuesto, las web y las redes sociales como Linkedin o Facebook.

Atendiendo a esta idiosincrasia dividimos la forma de trabajar en cuatro fases: la estrategia, el guión, la producción y la difusión.


La fase estratégica es un análisis de las instrucciones, aunque va más allá

Esta fase la desarrollamos mediante un cuestionario:

  • ¿Por qué hay que hacer este vídeo? ¿Cuál es su objetivo? Conocer un producto o alguno de sus aspectos, ilustrar un proceso, un modo de acción, la venta, la fidelización...
  • ¿A qué público nos dirigimos? 
  • ¿Qué duración pensamos que sería conveniente? Una demo o un clip formativo puede durar hasta 5 o 10 minutos pero un vídeo promocional debe limitarse a 1-2 minutos.
  • ¿Es un vídeo único o forma parte de una serie? Esto haría cambiar el planteamiento de la producción.
  • ¿Qué es lo que hay que contar? ¿Cuáles son los puntos claves que hay que destacar? ¿Cuáles son los motivos o beneficios por los que hay que ver este vídeo? Hay que dejar clara la propuesta de valor.
  • ¿En qué genero de vídeo estamos pensando? De una forma resumida los géneros más empleados en veterinaria son: entrevista, discurso de autor, animación (2D-3D), demo o tutorial, reportaje (corporativo o de otro tipo), y spot publicitario. Y todas las fusiones entre los géneros hasta donde alcance la creatividad.
  • ¿Cuál es el tono? Hay vídeos que requieren un tono científico, otros profesional pero desenfadado, algunos cómico, etc.
  • ¿Hay que pedir una “llamada a la acción"? Si queremos que el espectador haga algo o se quede especialmente con un mensaje conviene especificarlo y tenerlo en cuenta para plantear las escenas. 
  • ¿Cuáles van a ser los canales de difusión del vídeo? Hay canales, como las redes sociales, que necesitan un tono especial. Además, es importante tenerlo en cuenta porque el canal determina si van a ser necesarios subtítulos, los originales que hay que preparar, etc.
  • ¿Cómo vamos a dirigir a nuestro público hacia el vídeo? Bases de datos para una campaña de email marketing, presentación directa, delegados...
 
 

La fase de “guionización”, territorio del visual-storytelling

Es el momento de ponerse manos a la obra siguiendo un procedimiento:

  1. Elaboración del guión, la narración de la historia destacando los puntos claves o hitos. Hay que adaptarse al tipo de vídeo. No es lo mismo un videotutorial que la presentación de un producto o la descripción de un mecanismo de acción. Cada “género” tiene sus particularidades que el guión debe atender. Si se tiene claro lo que hay que contar el guión puede adoptar la forma de un script con dos columnas, una para la narración y otra para las notas sobre las escenas.
  2. Construcción del story-board. Con esta herramienta ya nos hacemos una idea de cómo va a ser el vídeo. Las viñetas del story-board nos permiten visualizar las escenas y los planos más importantes así como los comentarios recogen la locución y todos los detalles y recursos de vídeo y audio.  

Esta es la plantilla que empleamos en dr.Herriot para plasmar el story-board y recoger cada detalle antes de producir el vídeo.

 

La fase de producción, la hora de la verdad

Una vez aprobado el story-board se pasa a producir el vídeo. En la producción, según el género del que se trate, hay que atender los siguientes pasos:

  1. Preproducción. Más ardua en los vídeos que requieren rodaje. Se suele elaborar una escaleta donde se anotan todas las necesidades, desde la localización hasta cualquier objeto de atrezzo que se vaya a necesitar. Si es una animación hay que validar los personajes si no se ha hecho ya en el story-board.
  2. Producción. Es el momento del rodaje o de la realización de las escenas de la animación.
  3. Montaje. La calidad de la historia depende del montaje, podríamos decir que es la fase más delicada. En este paso se ensamblan las escenas y se realizan las transiciones entre escenas. 
  4. Posproducción. Es el momento de añadir sonidos, recursos gráficos, entradillas y cierres con identificadores de marca, subtítulos...


Difusión del vídeo

De nada sirve todo lo que se ha realizado si no se tiene un buen plan de difusión. Estas son las tareas de esta fase y que completan el proyecto.

  • Revisar el plan de difusión establecido y preparar un calendario definitivo.
  • Exportar los vídeos en las versiones requeridas para cada canal:
    • Resolución óptima. Aunque los vídeos suelen producirse a la resolución de 1920x1080 (full HD), no siempre es recomendable emplear esta resolución en todos los canales.
    • Exportación con o sin subtítulos.
    • Exportación de las diferentes versiones de montaje, si las hubiera. En ocasiones se realizan versiones largas y cortas de un mismo vídeo para utilizarlas en diferentes canales.

Enfrentarse a la producción de un vídeo da cierto vértigo por la cantidad de factores que intervienen, pero con un protocolo completo, como el que seguimos en dr.Herriot, el proyecto se puede acometer con comodidad y confianza. 

Autor: Javier Nuviala